El acuerdo que paraliza la cartuja llega al juzgado y Ezcabarte acuerda comparecer

El proceso de fiscalización del proyecto del polideportivo genera un intenso debate en el pleno

El propietario del Señorío de Náguiz, donde se quiere instalar la Cartuja, ha presentado un recurso contencioso administrativo contra el acuerdo del Ayuntamiento de Ezcabarte que paralizaba este proyecto, el cual suspendía durante un año "el otorgamiento de licencias de parcelación de terrenos, edificación y demolición en áreas o para usos determinados" en suelo forestal. Ayer el Consistorio decidió comparecer en el procedimiento y oponerse a las medidas cautelares de suspensión de ejecutividad.

No obstante, la propuesta que llevó a la sesión la alcaldesa, Carola Gutiérrez (IA), fue de "no comparecer" y adujo al respecto que "no está motivado el acuerdo y no tiene ningún sentido gastar cuando el Ayuntamiento atraviesa momentos difíciles porque vamos a hacer lo que diga el juez". Una opinión que compartieron Pedro Lezáun y Javier Iriarte (AIVE). La propuesta de alcaldía no salió adelante al votar en contra los tres ediles de ACE (Félix Idoate, Rufino Arraiza y Evaristo Urriza) y Josetxo Alastuey (IA). Asimismo, se designó como abogada a Lorea Talavera Santano.

En la sesión también se aprobó, con la abstención de Idoate y Arraiza, la convocatoria de subvenciones para escuelas de música. Gutiérrez destacó que antes sólo se ayudaba a los estudiantes de Hilarión Eslava y el próximo curso se abre a "las escuelas de música en general".

En el turno de ruegos y preguntas, Idoate mostró su "absoluta indignación por el trato sufrido" durante el proceso de fiscalización del proyecto de polideportivo, cuya demanda archivó el Tribunal de Cuentas, y acusó a Gutiérrez, Lezáun e Iriarte de actuar con "mala fe, inquina y falsedad". Pidió al Consistorio que publique "íntegramente" el auto y "se haga responsable de los costos ocasionados a él y al funcionario" afectado. Tanto Gutiérrez, como Lezáun e Iriarte quisieron dejar claro que "en ningún momento ha habido mala fe, acusaciones de falta de honradez, ni inquina". Lezáun dijo que "solicitaron un informe de fiscalización a Comptos porque el precio de la obra se había encarecido un 37% respecto al inicial" y que "al Tribunal de Cuentas le llevó Comptos". Iriarte añadió que "la gestión del polideportivo se llevó mal" y "nadie ha reconocido el error".

fuente :"Diario de Noticias"

fotografía : Jesús Chueca Zalba